En exclusiva, ayer Tribuna Deportiva informó sobre el crucial acuerdo financiero que ha alcanzado el Valencia CF con el banco estadounidense Goldman Sachs, cuyo propósito es redefinir el panorama económico del club. Este pacto, cerrado el pasado 30 de octubre en Madrid, establece una hoja de ruta que permitirá al club avanzar en la construcción del Nou Mestalla, mientras fortalece su estructura financiera y cancela deudas históricas.
El acuerdo implica un préstamo de 186 millones de euros que el Valencia CF deberá devolver en un plazo de entre 10 y 12 años, con un tipo de interés de entre el 6% y el 7%, cifra que reduce el promedio del 9% que el club pagaba a acreedores anteriores, como CaixaBank. Además, el préstamo incluye una carencia de dos a tres años, tiempo destinado a facilitar la finalización del nuevo estadio antes de iniciar el pago de las cuotas.
Un cambio radical en la deuda del club
Contrario a lo que podría pensarse, Goldman Sachs no ha otorgado directamente estos fondos, sino que ha actuado como intermediario para conectar al Valencia CF con fondos de inversión provenientes de Estados Unidos, Canadá y otros países. Los beneficios inmediatos de esta gestión ya se ven reflejados en el saneamiento financiero del club, que utilizó una parte de este capital para liquidar su deuda histórica con CaixaBank (de ya 20 años), Right Media y Gedesco.
Con la cancelación de estas deudas, el Valencia CF ha recuperado activos clave: de CaixaBank recupera los derechos urbanísticos del actual estadio de Mestalla, el 43% de los derechos televisivos y el 92% de la publicidad estática del estadio; de Right Media y Gedesco, el club vuelve a poseer la ayuda por descenso y otros porcentajes de derechos televisivos.
Servirá de impulso para el Nou Mestalla
Este acuerdo es solo el primer capítulo. Ahora, el club negocia un segundo crédito, estimado inicialmente en 100 millones de euros, aunque se prevé que 80 millones serían suficientes para completar el Nou Mestalla. La intención es finalizar estas negociaciones después de la Junta General de diciembre de 2024. Goldman Sachs, principal impulsor de esta segunda financiación, tiene interés en la conclusión del estadio, ya que asegura el retorno de la inversión a sus financiadores.
La reanudación de las obras del Nou Mestalla está prevista para antes del 12 de enero de 2025, y aunque el club cuenta ya con 85 millones de euros de CVC y 35 millones de Atitlán, el aporte de Goldman Sachs será esencial para llevar el proyecto a buen puerto.