Nestor Fabián Canobbio (Montevideo, 1980) atendió a Tribuna Deportiva para repasar su experiencia en Valencia y los asuntos de actualidad. El atacante uruguayo, con una larga carrera entre La Liga y Uruguay, quiso poner luz sobre temas de actualidad y sobre sus experiencias vividas en el Valencia CF. El futbolista analiza también la gestión del club, la plantilla actual y temas relacionados con la época dorada del club que le tocó vivir en primera persona.

Sobre su llegada al Valencia

«Fue mi primer club en Europa. Llegar a un club como el Valencia fueron muchos cambios en muchos sentidos. La adaptación fue fácil. Fue un año rápido, intenso y con grandes logros que 20 años después te das cuenta de lo que significó ese equipo. Se nombraban jugadores importantes y surgió mi llegada que sorprendió. Traté de demostrar día a día que tenía las condiciones»

Sobre su relación con Rafa Benítez

«Coincidí con Rafa Benítez en Vigo, hablamos 5 minutos y le hice la broma de que hace 20 años que sigue esperando un sofá y le siguen mandando una lámpara. Una de las experiencias más lindas de mi vida la viví junto a él. Hablamos de la vida y le pregunté cómo le iba en Vigo. Me lo tomé bien desde el primer momento. Interpreté bien la frase pese a tener 23 años. Rafa se tomó la molestia de hablar conmigo porque aquello generó alboroto en prensa. Quedó en la frase de la lámpara y el sofá. Si hubiera sentido rechazo real me habría vuelto a casa»

Sobre la competencia en el equipo

«Jugar era complicado, Vicente era una cosa increíble. Jugar de media punta era difícil porque también estaba Aimar. El recuerdo que me queda de ese año es del nivel humano y competitivo del grupo. El trabajo nos hizo fuertes. Ganábamos por empuje y constancia»

Sobre la plantilla

«Le jugábamos a cualquier equipo de forma humilde pero sabiendo que les íbamos a hacer sufrir mucho para conseguir algo contra nosotros. En el comienzo tenía más relación con los argentinos porque el mate siempre une. Tuve buena relación con todos. Me sorprendí porque en los viajes me pedía Cañizares mate (risas). La convivencia fue genial, pese a que fue poco tiempo. A la hora de competir éramos una piña»

Sobre Vicente Rodríguez

«Vicente fue el futbolista de ese año. El resto acompañaban. Aimar jugaba mucho al fútbol, el doble 5 era impresionante y Mista con sus goles. Fue descomunal ese año. Una locura. Se ven pocos extremos con esa calidad y potencia. Era muy especial. Quemaba el césped por la banda»

Sobre la situación actual

«Sigo el fútbol en general. Estuve hace poco en Valencia y hay una sensación de inestabilidad. Se habla del estadio que no se terminó, que parece una ruina. Me da la sensación de que no hay un rumbo. Me hablaron bien del Pipo. Desde fuera no sé si hay una hoja de ruta. Es una pena. Porque yo he estado seis años de presidente en un club en Uruguay y aquí hicimos una transición a las SAD. El fútbol se vuelca para ese lado y a veces los inversores saben poco de la esencia del fútbol. Tirar a los canteranos dentro del campo es una lotería»

Sobre Mestalla

«Era hermoso jugar de local. La gente respondía a lo que hacía el equipo. Este equipo contagiaba energía, fuerza y eso hacia que el hincha empujase. Eso nos hacía más fuertes»