El Valencia CF cuenta con aproximadamente 2 millones de euros de margen en el límite de Fair Play Financiero para realizar fichajes en el mercado de invierno, lo que ha generado la posibilidad y la búsqueda de incorporar refuerzos clave en posiciones críticas que se han visto afectadas por lesiones o por falta de rendimiento y efectividad.
A día de hoy, el equipo que dirige Rubén Baraja se encuentra en una situación complicada, ocupando el último puesto en la tabla de LaLiga, lo cual aumenta la urgencia de sumar calidad en el vestuario. Las lesiones en defensa y ataque han acelerado y desnudado esta necesidad que para muchos ya era evidente. La prioridad es fichar un lateral derecho que cubra la baja de Thierry Correia, quien estará fuera de los terrenos de juego por lo que resta de temporada tras romperse el ligamento cruzado.
Esto permite al Valencia reintegrar el 80% del salario de Thierry dentro del límite financiero, facilitando la búsqueda de su reemplazo en el lateral derecho. Además, el equipo analiza la posibilidad de reforzar la delantera, aunque dependerá del margen restante o de posibles salidas en enero que liberen aún más espacio en el presupuesto de fichajes.